Nuestros productos ibéricos.
Biencriados. Biencurados.

En Finca Roncales nos ocupamos desde que nacen de la alimentación de nuestros animales con una atención máxima, y solo así conseguimos la calidad extrema de nuestros productos ibéricos.

¿Gran Crianza o Crianza?

Todos nuestros productos ibéricos los puedes encontrar en dos gamas: Gran Crianza y Crianza. La diferencia entre ambas se establece en la última fase de crecimiento de los cerdos.

Los productos ibéricos con etiqueta Gran Crianza provienen de cerdos que se alimentan exclusivamente de los recursos naturales de la Sierra Norte de Sevilla, principalmente bellotas.

Los productos con etiqueta Crianza provienen de cerdos cuya dieta a base de recursos naturales de la Sierra Norte de Sevilla se complementa con piensos naturales.

¿Jamón o paleta?

La principal diferencia es la anatómica: los jamones son las dos patas traseras del cerdo y las paletas las dos patas delanteras. Por lo tanto, el jamón es más grande y carnoso que la paleta, y su tiempo de curación es también mayor. En cuanto al sabor las diferencias pueden parecer sutiles, pero el gusto de la carne de la paleta es más intenso y potente al estar más cerca del hueso (aunque con menos matices por su período de curación más corto) y el del jamón en cambio es más suave y complejo.

Caña de lomo, la más noble.

La caña de lomo es la reina de los embutidos. Su único secreto es la calidad de la carne con la que se elabora. Y la del cerdo ibérico, con sus infiltraciones naturales de grasa, es la más apreciada de todas. Este producto proviene de la parte superior del animal, el lomo, que se extrae entero y se limpia previamente antes de su elaboración. La caña de lomo es uno de los embutidos más saludables, ya que se elimina la grasa adherida y solo se mezcla con condimentos naturales. Su sabor es tan irresistible que hay paladares que la prefieren al jamón.

Aunque la mayoría de nuestros clientes prefieren abrir su jamón o paleta ellos mismos, nuestros maestros cortadores pueden preparártelos envasados al vacío en sobres de 100 gramos de peso.

Podrás ir consumiéndolos en cualquier ocasión y lugar, con la seguridad de que el producto conservará todo su sabor y la textura del jamón recién cortado a cuchillo. ¿Cuál de las dos opciones se adapta mejor a ti?